si yo te invento, pero no te adoro?
¿Por qué si vienes, viene igual mi lloro,
y, con frío, la piel me correspondes?
Te hablo, y en puros ecos me respondes,
mientras que, con el grito más canoro,
te pido, cuando luego me incorporo,
que me supongas fuerte y no me rondes…
Ve la estela de mis pasos, que me muevo
a todas partes… ¿ando a pie o me elevo?
¡Pero tu sombra para atrás me lanza!
Ve que la vida joven no me alcanza,
que contigo, entre dudas se abalanza,
que sin ti, todo aprueba y yo me atrevo…
Osfelip Bazant